¿Qué puedo hacer por mi Restaurante?

Vivimos tiempos complicados y a su vez llenos de oportunidades, y parece que la digitalización tiene la llave del éxito. Pero no hay que perder la perspectiva, la digitalización es una herramienta no un fin. No por digitalizar el negocio se alcanzará el éxito.

Se ha llegado a una situación donde la información que puede consultar el cliente, la subida de los precios de la materia prima como de la energia, imposibilitan en gran medida subir los precios para mantener los márgenes. ¿Y qué puede hacer el responsable de un negocio para mantener el margen de beneficio? La respuesta es sencilla, sino puedo subir los precios en la medida que suben los costos, se tienen que reducir y controlar los gastos del negocio. En este sentido, en los sondeos de los negocios que se están desarrollando se ha detectado que muchos de los restaurantes necesitan definir las bases del negocio, no llevan un control de los procesos, desconocen los focos de despilfarro y no tienen un plan de futuro. Esto lleva a una reducción del margen y por consiguiente a una disminución de beneficios. 

¿Cómo se puede invertir esta situación? Con un cambio de chip. En el sector de la hostelería las herramientas de mejora existen desde hace tiempo, pero no se utilizan por miedo al cambio. Las condiciones actuales obligan al cambio y mejor empezar a cambiar hoy que mañana. Uno de los responsables de un negocio comentaba que este miedo al cambio es la piedra que lleva el sector sobre los hombros. El primer paso es desear el cambio y hacer participe a todo el equipo del negocio de esta necesitad basándose en la comunicación y la transparencia.

 Hay que controlar los gastos buscando la eficiencia del negocio con los recursos disponibles y sin mayores costes. Antes de nada, hay definir el negocio y ver la situación para saber donde incidir, hay negocios que carecen de un control de costos, otros desconocen las mermas de tiempo, producto y dinero y otros no saben la opinión de los clientes. Es necesario establecer un plan con objetivos e indicadores, y medidas de acción. Lo que no se puede medir no se puede controlar y lo que no se puede controlar no se puede mejorar.

 A día de hoy existen una diversidad de herramientas, donde se encuentran las herramientas digitales. Estas herramientas son medios necesarios para facilitar los procesos de trabajo y proporcionar información para la toma de decisiones, además de potenciar la relación con el cliente. 

Como conclusión, resumir, qué hay fomentar la comunicación interna de los negocios informando de forma transparente y llevar un control general pormenorizado para poder avanzar hacia una digitalización del negocio en las áreas que realmente lo necesiten. 

Reflexión “No por mucho correr se llega antes”.